lunes, 16 de julio de 2012

A vueltas con la transexualidad



Valga decir, a modo de epílogo que no tengo ningún interés en cambiarme de sexo y que respeto profundamente a todas esas personas transexuales, al igual, que respeto al resto de la humanidad.






Ayer se empezó uno de esos debates políticos y gratuitos que tanto frecuentan Internet últimamente. No se si todos mis amigos del facebook son socialistas, peperos decepcionados, o simples "protestantes" (entendiendo como protestante aquella persona que protesta) acomodados en su sofá y metidos en el circulo vicioso de la crítica tan constante como poco constructiva.






Una amiga protestaba porque las gafas y lentillas pasan a tributar con el IVA nuevo.Entiendo la queja, porque al final de cuentas, yo también consumo, y esa subida de IVA me va a repercutir como al resto de la gente. Ahora bien, criticar una decisión política a base de seguir discriminando al colectivo, en este caso el transexual, me provoca, como poco, dolor.






No voy a copiar el comentario, porque tampoco es el caso, pero en resumen, era algo como: "muy fuerte que yo me tenga que pagar unas gafas, pero si alguien se quiere poner picha, se lo hagan gratis"






La gente no se pone picha (o chocho) así por que si. Un transexual lo es desde el día que nace, hasta el día que se muera, o incluso mas, porque probablemente, una vez muerto, seguirá habiendo gente que hable con desprecio de ese vecino/conocido que nació siendo hombre, se hizo mariquita, y luego decidió hacerse mujer. O viceversa.






No conozco, por desgracia, a nadie que se haya cambiado de sexo, pero realmente, me encantaria, porque las experiencias de los demás nos enriquecen y nos enseñan mucho sobre la vida, y personalmente, la vida es una de las cosas que mas me gusta. Pero si que estoy segura de que nadie, absolutamente nadie, es plenamente feliz con una transexualidad.






Con todo esto, lo único que quiero decir es que no hay que confundir una operación de cirugía estética, como puede ser una liposucción o un aumento de pechos o retocarse una nariz con una operación de cambio de sexo. De hecho, para cambiarte el sexo, hay que pasar todo un proceso, que incluye terapia psicológica y para aumentarte los pechos, basta con poner 3.000 euros encima de una mesa y tu cuerpo encima de una camilla de operaciones.






Injusticias, por desgracia, hay en todas partes,y posiblemente, en la Seguridad Social también. Ahora bien, quejarse a base de menospreciar a otras personas, no me parece para nada correcto.






Para terminar, a modo de conclusión, solo diré que nadie se ha suicidado por llevar gafas, pero que la tasa de suicidio en el colectivo transexual es una de las más altas del país. Ya cada cual, que saque sus propias conclusiones.






T.





2 comentarios:

  1. Estoy totalmente de acuerdo. Yo sí que he conocido a una persona transexual que cambio de hombre a mujer y realmente lo pasó peor de lo que una persona puede pensar. Además un dia que fui al Hospital Civil a acompañar a mi madre al ginecólogo, este estaba junto con los psicólogos y ginecólogos que se dedican a tratar a las perdonas que se quieren cambiar de sexo...y realmente invito que algún dia os paséis por allí y escuchéis todo lo que esas personas cuentan,es realmente algo increíble que te pone la piel de gallina y pasas días,incluso semanas pensando en sus testimonios.. He de decir que una operación de cambio de sexo puede llevar un proceso de varios, muchod años llendo al hospital cada dos por tres.. Siempre para hacerte las mismas preguntas y hasta que los psicólogos no ño decidan, la operación no se hace...

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  2. Perdón por el "llendo " es "yendo ", el movil con texto preferido juega malas paradas...

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